lunes, 17 de septiembre de 2007

CAPÍTULO 54 Cocodrile, crocodile, cocodrilo...cancodrilo

Hace unas semanas, subí a YouTube un video que "rodé" con el teléfono en mi otra patria. El formato en el que el magnífico Sony Ericsson-K800i graba los vídeos no es un mpg., así que cuando lo subí, como no se veía lo borré. No se borró.
Pasadas unas fechas desde ese día, me llega un correo porque alguien ha dejado un comentario en your video. - ¡ein!, ¿en qué vídeo?- . Pues sí, en el que en su momento bauticé como "cocodrile": sí, se me fue la olla y lo escribí mal.
Comentario del fulano: -"dude... crocodile...."
Lo que debía de haber contestado: senks, my pot gone with the wind!
Pero no, me tocó los cojones ese "colega...", así que me hice el loco (por joder) y le respondí: "sorry, cocodrilO (in spanish)".
Bueno, ahora podéis disfrutar del cancodrilo de marras. El vídeo en cuestión:

El de más de cuatro metros es el cancodrilo. El del acento gallego soy yo. Al que solo se le entiende "guora" es un australiano 100%.
El vídeo que se puede ver en el apartado de "related", tras ver el mío, está muy bien.

2 comentarios:

Alfonso Alba dijo...

Hostia colega. Para qué quiero un perro pudiendo tener un cocodrilo. Desde luego que los australianos están hechos de otra pasta. Yo, al más leve movimiento del agua, habría puesto pies en las Blue Mountains

Caesares8 dijo...

El tío charlaba con toda la calma del mundo y te aseguro que si no llega a ser por lo alto que es, el cocodrilo aun se vería más grande.